Al inicio del año nos encontramos como comunidad para celebrar la eucaristía en torno a nuestro patrono San José, y al finalizar nuestro año escolar le agradecemos a Dios, por medio de nuestra madre María al completar el mes dedicado a ella.
La eucaristía tuvo varios signos importantes que marcaron el año escolar: la oración del Ángelus, la casa de todos que construimos en el mes de la solidaridad, el corazón entregado por los alumnos de cuartos medios y los talentos que ofrecieron los octavos básicos.
El padre Francisco Herrera nos habló sobre el buen descanso necesario de toda persona y no tomar vacaciones de Dios, pues Él está siempre atento a nosotros.
Al finalizar se le dio una bendición especial a los niños de prebásica que tendrían su obra especial sobre la navidad y a los cuartos básicos que ya van pasando a quinto, cambiando incluso de su espacio, pasando de ser los más grandes del anexo para ser los pequeños del Liceo.
Equipo de Pastoral